"Estado de calamidad pública", fue lo decretado por el gobierno local en la noche del miércoles, ya que el territorio continúa afectado desde hace más de una semana por fuertes lluvias y tormentas, que provocaron deslizamientos de tierra e inundaciones.
La situación no parece mejorar y ya son 21 las personas desaparecidas, según el último informe de Defensa Civil.
El riesgo de rotura de la represa Dal Bó fue informado este jueves por el Servicio Municipal Autónomo de Agua y Saneamiento (Samae), que emitió una alerta por el nivel de agua en el embalse, y solicitó la evacuación de los barrios próximos.
El organismo indicó que solo restan entre 10 y 15 centímetros para que la represa se desborde.
El gobernador de Río Grande do Sul, Eduardo Leite , declaró el estado de calamidad pública debido a los más de 100 municipios afectados por la tormenta en el estado. El decreto tendrá una vigencia de 180 días.